Fácil, fácil, fácil. Poco más se puede decir de la victoria del líder, el Real Madrid, ante el Rácing de Santander más flojo que ha visitado el Bernabéu en los últimos años. Muy poquito tuvo que pisar el acelerador el conjunto merengue para endosarle seis goles a los de Miguel Ángel Portugal. Tan poco, que en ocasiones hasta daba la sensación de que los goles iban cayendo "sin querer", como si las tremendas facilidades defensivas otorgadas por los visitantes influyeran más en los goles que la propia pericia del ataque blanco. A destacar los cuatro goles anotados por Cristiano Ronaldo, que se pone al frente de la clasificación de goleadores. El portugués parece haber dado con la fórmula secreta, por lo que la intensa sensación de ansiedad que mostraba en el inicio de temporada parece cosa de un pasado que se antoja muy lejano.
La oposición que encontró el Barcelona en Zaragoza no fue mucho mayor que la del Rácing en el Bernabéu. Un gran Messi, que ya jugó un partidazo en este mismo estadio la temporada pasada, llevó las riendas del conjunto catalán, siendo, además, el autor de los dos tantos de su equipo. Los de Guardiola parecen seguir la estela del Madrid sin demasiados problemas, por lo que las próximas jornadas serán decisivas para ver cómo llega cada uno al clásico del 28-N. A priori y a tenor de la fuerza mostrada por ambos conjuntos en estas primeras jornadas, sólo ese partido puede hacer que uno de los dos pierda algún punto en una liga que corre el riesgo de volverse a convertir en un mano a mano entre estas dos escuadras, algo que hasta ahora sólo ha sido evitado por el aguante de un sorprendente Villarreal. El Zaragoza sigue con los mismos problemas de siempre, aunque como ya apuntáramos la semana pasada, no era esta la mejor jornada para cambiar la tendencia, la verdad. Los maños continúan sin conocer la victoria.
Un inconmesurable Villarreal sacó adelante un partido muy importante. La victoria en casa ante el Atlético de Madrid, un rival directo del conjunto levantino, permite al equipo dirigido por Juan Carlos Garrido mantenerse por delante incluso del todopoderoso Barcelona. No es ese el objetivo del submarino amarillo, es cierto, pero todo lo que sea estar en esta situación ahora es hacerse un colchón ante posibles malas rachas en jornadas venideras. Los de Quique, por su parte, pierden tres puntos muy valiosos y salen, así, de los puestos que dan acceso a la Europa League. La jornada que viene se enfrentan al Almería y deberían obtener los tres puntos si quieren llegar al derby del 14 de Noviembre, con una mínima tranquilidad.
El batacazo que se ha llevado el Valencia en esta jornada ha sido muy gordo. Perdieron, sorprendentemente, ante un Mallorca que cada vez hace mejor juego, por lo que dejan de sumar tres puntos por segunda semana consecutiva. Se mantienen, de este modo, en una cuarta plaza que sabe a poco después de haber sido el líder de la clasificación durante varias de las primeras jornadas.
El partido que se pudo presenciar en el Sánchez Pizjuan, entre el Athletic y el conjunto local, el Sevilla, fue de lo mejor de la jornada. No tanto por el juego, sino, sobre todo, por la cantidad de goles. De los siete, cinco fueron en la segunda parte, viendo el conjunto vasco, por un momento, como se abrían ante sí las puertas de la remontada. Al final, un gol de Kanouté en el minuto 80, acabó con las esperanzas bilbaínas en la capital andaluza.
Otro equipo que no levanta cabeza, y que sigue sin sumar un único triunfo en lo que va de temporada, es el Deportivo de Miguel Ángel Lotina. En esta octava jornada fue la Real Sociedad la que se encargó de hundir un poquito más en la miseria al conjunto gallego. Un contundente 3-0 en Anoeta vuelve a poner en duda la continuidad del míster al frente del equipo de Lendoiro. Desde las oficinas de Riazor se sigue confiando en el entrenador, pero el aficionado gallego mira cada vez con más enojo hacia el palco buscando una solución al desaguisado en que se ha convertido este inicio de temporada.
El Espanyol sigue creciendo poco a poco. "Piano, piano" que dirían en Italia, el conjunto dirigido por Pochettino continua subiendo peldaños en la tabla clasificatoria, hasta auparse a la quinta plaza que ocupan en estos momentos. En esta jornada, la víctima fue el Levante, aunque la diferencia de un gol en el marcador (2-1) pone bien a las claras que el conjunto valenciano jugó un partido serio, muy decente, lo que le permite continuar fuera de los puestos de descenso.
El Getafe, dirigido por el ex-madridista, Míchel, le endosó al Sporting de Gijón un contundente 3-0, por lo que se aúpan hasta una muy merecida séptima plaza. Parece milagroso que un equipo casi de barrio, siempre a la sombra de los dos gigantes de la Comunidad de Madrid -Real y Atlético-, se mantenga en la "zona noble" de la tabla año tras año. Las cosas parecen saber hacerse mejor que bien en casa del constructor y presidente del Getafe, Ángel Torres.
Idéntico resultado, 3-0, fue el cosechado en el Reyno de Navarra por el Osasuna. El rival, y por lo tanto, el equipo derrotado, fue el Málaga, que sigue desinflándose como un globo a cada jornada que pasa. Con este resultado, el conjunto andaluz queda empatado a puntos con el Rácing, que ya ocupa puesto de descenso. El Osasuna coge aire y se situa en la decimosegunda plaza con nueve puntos.
El único empate de la jornada se produjo en el estadio Mediterráneo, en el partido que enfrentaba al Hércules y al Almería. El 1-1 final no puede dejar satisfecho a ninguno de los dos conjuntos, ya que ambos siguen ocupando plazas peligrosas de la clasificación. El conjunto alicantino está decimotercero, mientras que el equipo de Lillo sigue caminando junto al abismo de los tres últimos puestos. Lo dicho, peligrosa situación.